porque no está mal que terminen las historias mientras haya historias que contar

29.3.09

Por miedo estoy retractandome. Me doy más pena que nunca. Okey, ya me voy a arrepentir. Ahora, voy a decir NO.

24.3.09

Ausente-Presente

Hace una hora que estoy mal. Hace un mes que no actualizo este blog. Hace un año que el cielo tiene a un angelito más. Hace 33 años fue el golpe de estado que destruyó un país, miles de familias, tantos sueños... Pero no vengo a hablar de historia. No vengo a enseñar nada a nadie. No voy a hablar de lo que no sé, de lo que no estoy segura.

Hace un año me dejaste, como ya dije. Suena significativo. A mí no me duele más que ayer. O sí, pero es gradual como cada día que pasa, que el dolor se incrementa un poquito más. Tan poco que a veces es imperceptible. Te extraño. Como siempre. O un poquito más. Creo que lo doloroso de estas fechas es decir: pasó un año. Cuando el tiempo pareció ser tan poco. Uno cae en la cuenta de hace cuánto que le falta una compañía que parecía necesaria. Nos surge la duda existencial: ¿cómo hice para estar sin vos? Siempre se sigue. O por uno mismo, o por quien se fue, o por quienes quedan. O por todos. Y algunos bajan los brazos. Pero yo no soy de esos. Lo hago por vos y por mí. Y te extraño mucho, pero te tengo conmigo. Adentro de mí, y a veces te juro que te siento. Y no hay sensación que me haga más feliz.
Te quiero mucho y tu presencia física se extraña. Pero sí, yo sé que estás.